Una rotonda da acceso a la cochera y un volumen de mármol que se desprende, con un pergolado y un espejo de agua remata visualmente y dan el acceso principal al interior de la residencia.

Con grandes ventanales se extiende la vista hacia los jardines con un esquema de diseño que respeto la arborización y también aprovecho la vista panorámica a la ciudad, consiguiendo así que la casa maneje aperturas hacia un exterior propio dominado por el escenario de los jardines.

“Para el despacho, era de suma importancia el trazo del diseño y ver cuál era el mejor acomodo de la casa con la limitante de una cimentación existente, de tal manera que se resuelve en desniveles, en donde cada espacio estuviera en contacto con la naturaleza”.

Los espacios interiores hacen un juego de escalas, el área social es doble altura lo que hace una sensación de mas a menos con respecto a las demás áreas, logrando así espacios cálidos en las zonas privadas.